martes, 6 de marzo de 2007

Cuida tus obras

Es cierto que dicen que el arte es eterno. Los artistas crean imagines intemporales que hablan a la gente a lo largo de los siglos. Sin embargo, las creaciones artísticas son muy delicadas a la vez. Tus obras de arte no se convertirán en obras intemporales si no las cuidas apropiadamente. El marco de tu obra de arte no solo tiene una función estética, sino que además protege la obra de diferentes maneras a la vez que le da un punto resistente del cual colgarla.

La importancia del enmarcado

El marco tiene diferentes funciones: protege tu obra de arte, la preserva y la ayuda a integrarse en la decoración existente. La calidad del marco podrá realzar tu obra de arte, dándole el toque perfecto para realzar su belleza. Elegir un enmarcador:El marco es una obra de arte en sí mismo. Y puede ser difícil encontrar un buen enmarcador.

El marco

Lo más importante es que el marco debe ser fuerte. La idea es que el marco sostiene la obra de arte, la obra de arte nunca sostendrá el marco. Como regla de guía, los bordes deberían extenderse al menos 1 cm. sobre la superficie de la obra, esto protegerá la superficie de la obra de ser golpeado.

Elegir una obra de una selección de miles de creaciones puede ser difícil, pero seleccionar el marco más apropiado puede resultar bastante duro. La primera recomendación es la simpleza. Actualmente los marcos demasiado elaborados no son populares y muchos artistas prefieren enmarcar sus obras del modo menos intrusivo posible. Los marcos sencillos son además más baratos, y no distraen la vista de la obra de arte, a la vez que se integran con casi cualquier estilo de decoración.

Estéticamente hablando, los marcos tienen dos funciones principales. En primer lugar, el marco debería realzar, pero no eclipsar la obra. En segundo lugar, se puede utilizar para integrar la obra de arte en la habitación.

Cuando escojas un marco trata de que no desentone con los objetos que ya hay en la habitación en la que la obra se colgará. Por ejemplo, si la habitación está decorada con elementos y mobiliario modernos, podrás integrar una obra clásica simplemente eligiendo un sencillo marco negro o cromado.

Ensamblaje y tabla de reverso

Los enmarcadores montan la obra de arte en lo que es conocido como la tabla de reverso. Esta tabla sirve para proteger la obra de arte a la vez que crea un microclima para el soporte de la obra, es de vital importancia que la tabla esté libre de ácidos. Los marcos baratos están hechos a menudo con una tabla de reverso que no está libre de ácido. Aunque la cantidad de ácido sea muy pequeña, con el paso del tiempo esto puede causar daños a la obra de arte. Por desgracia, incluso las tablas vendidas garantizando que están libres de ácido o con calidad de museo, no nos garantizan una calidad apropiada. Busca tablas que tengan cierto nivel de alcalinidad o con PH neutro.

Es especialmente importante montar las obras fotográficas en tablas que garanticen estar libres de ácido.

El ensamblaje se hace generalmente con dos tables. Una se utiliza como parte trasera para la obra de arte, la otra se conoce como la “ventana”. La ventana se coloca sobre la obra de arte y crea un espacio importante entre la obra y el cristal. La ventana debería estar cortada a bisel para eliminar sombras que procedieran de la ventana. En algunos casos se utiliza un espaciador entre la ventana y el cristal. Los espaciadores se pueden utilizar para que el cristal esté bien colocado sobre la obra de arte o en caso de no querer utilizar una ventana.

Ten en cuenta que la tabla del reverso debe ser lo suficientemente fuerte como para sujetar la obra. Las tablas tienen diferentes anchuras: dos, cuatro y ocho. Una tabla de cuatro es el mínimo que se puede usar para una obra de gran tamaño.

Las tablas blancas o incoloras son las más seguras y a la vez que estéticas y prácticas. Si eliges una tabla coloreada, asegúrate de que no destine en caso de entrar en contacto con el agua o humedad.

Es también muy importante que el marco esté bien sellado. Esto asegura que el daño por humedad sea el mínimo. Los enmarcadores utilizan papel de estraza para sellar las obras de arte. El papel de estraza se adjunta a la tabla del reverso y sella el marco.

Acrisralado

El cristal se usa como protección final de la obra de arte. Actúa como una barrera contra la suciedad y el polvo. Generalmente, se utiliza cristal o plexiglás (cristal acrílico). Es importante asegurarse de que el cristal está bien situado sobre la obra de arte. Las ventajas del plexiglás son que se puede preparar como filtro de los rayos ultravioletas, y proteger así la obra del deterioro por la luz.

Sin embargo el plexiglás se puede rayar fácilmente y puede formar electricidad estática. Lo que es más, no debería usarse para obras hechas al carboncillo o al pastel, ya que las partículas que se desprenden de estas obras pueden dañar el plexiglás. El cristal se rompe fácilmente y es un inconveniente cuando se enmarcan grandes obras de arte, sin embargo es más barato que el plexiglás y se raya con más dificultad.

Como habrás notado, hay muchas cosas a tener en cuenta a la hora de enmarcar tus obras de arte. La buena calidad de los marcos no es fácil de encontrar. Si no estás seguro, consulta a un conservador de arte, que será capaz de recomendarte un enmarcador de confianza en tu zona.

La luz daña las obras

Aunque la luz es obviamente un elemento importante para poder ver una obra de arte, también puede ser prejudicial para la pintura y las obras sobre papel. Con el tiempo, no solo puede ser la causa de que los pigmentos palidezcan, sino que también puede dañar el lienzo o el papel, dejándolo peligrosamente frágil.

Los museos llevan un riguroso control del nivel de la luz, utilizando monitores y dispositivos para conseguir el nivel adecuado de luz en cada obra. Aunque es muy difícil para nosotros hacer esto en casa, deberemos tomar ciertas precauciones para hacer mínimo el posible daño.

Intenta colocar tus obras de manera que no se encuentren expuestas directamente a la luz solar.

Evita usar luces sobre las obras, no solo la luz daña la obra, sino también el calor.

Puedes comprar luces incandescentes, libres de rayos UV. Las bombillas de bajo voltaje y las lámparas con filtros de luz te permitirán ver tus obras de arte de manera cómoda y segura a la vez. Si tienes iluminación con fluorescentes, también podrás adecuarlos con filtros UV, como alternativa, puedes enmarcar tus obras con plexiglás que proteja de los rayos UV.

También es recomendable mantener las cortinas y las persianas bajadas para mantener la habitación lo más oscura posible cuando no se utilice.

Otros enemigos de tus obras de arte

La luz no es el único elemento que puede dañar tu obra, las fluctuaciones en la temperatura y la humedad también son grandes enemigos. Aunque una Buena enmarcación puede ser muy protectora, hay una serie de precauciones que deberías tomar a la hora de colgar la obra de arte:

* Intenta no colgar tus obras de arte en paredes exteriores. Estas están más expuestas a los cambios de temperatura y humedad que las paredes interiores.

* No cuelgues las obras cerca de Fuentes de calor, tales como radiadores o chimeneas.

* Puedes proteger tus obras de arte de los cambios de temperatura y humedad asegurándote que hay un espacio entre la obra enmarcada y la pared. De este modo el aire podrá circular y no se formará humedad.

* Hoy en día se venden deshumidificadores portátiles que contribuyen en gran manera a la conservación de tus obras de arte. Si realmente sientes que debes colgar una obra en una habitación poco adecuada, como puede ser un ático o un sótano, típicamente húmedos y más susceptibles a fluctuaciones en la temperatura, es recomendable utilizar deshumidificadores.

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